Flujo de luz, de ideales de vida,
de súbita acogida
en este mundo en sombras;
en el sendero esa luz de revierte
como una cerrazón inerte
que encamina la vida,
y a la hora de la muerte
esa luz culmina
como cortando en silencios,
y en la nada se yergue
como inexistencia viviente.
Una luz comprimida
en un instante de vida
contra una eternidad
en que la nada
hace su experiencia de muerte.
Oscuridad absoluta,
en la vida o en la muerte,
la acción prostituida
de la esperanza se transforma
en signo de apariencia
donde los destinos fenecen
ante un futuro de nada.
y sin querer se proclama
un sentimiento de pesadumbre
que nace ferviente en el alma
y se prolonga en la esencia
se yergue como entre tinieblas
como en sombrías esperanzas
que acosan mis días y mi confianza
Se me van apagando los días
y no encuentro esa luz que agiganta
mis albores tempranos
y ese fulgor de constancia
que me ilumine el alma
Tal es mi visión utópica hoy…,
mañana será otro día.
CARLOS A. BADARACCO
15/10/11
No hay comentarios:
Publicar un comentario