jueves, 15 de septiembre de 2011

PERDURAR de CARLOS A. BADARACCO





Perdurar  no significa simplemente soportar
no es tampoco eternizar,
no es resistir ni tolerar,
no es estregar el alma, el no vivir,
no es siquiera el soportar ni aceptar
tanta injusticia sin repudiar.

Perdurar no significa meramente apelar
a los deseos sin sentir el alma plena,
la dignidad de ser libre de verdad
no significa el alentar l
a fe interna ni renunciar,
es reconocer la identidad
de ser yo mismo sin claudicar.

Abrirme al mundo y comprender
que ser honesto es la cualidad
de ser sincero con la fe,
 agradecido por el bien,
solidario y coherente con la verdad
como principio de razón,
como axioma fiel de la lealtad

Caminar seguro por la vida
obrando con auténtica empatía,
con la bandera alzada
y la osadía de luchar con fuerza
y con constancia
sentir la luz de la esperanza,
el coraje de hacerle frente a la desidia
en esta cruenta realidad.

Alzarse lleno de humildad
para entregar el alma a la equidad,
con entereza y con  nobleza
y con la firme convicción de ser fiel,
elevarme al mundo con la fe
puesta en el bien de la humanidad.

Intentar reconocer
los fundamentos de la amistad
sentir en el alma la pasión
de amar al prójimo y ensalzar
con una fe ciega  la igualdad,
 el sano juicio y la voluntad
de agradecer haber vivido con amor.


CARLOS A. BADARACCO
7/9/11

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