Quien bebe por sus ojos la injusticia
no puede escaparle al sufrimiento,
los maderos se mojan y quedan húmedos
hasta que el sol de la vida los reseca
pero si se mantiene oculto en la existencia
la humedad penetrará en sus entrañas
¿Quién le canta a la injusticia?
¿Quién puede estar dormido?
la cizaña rasga las vestiduras
y penetra en los cogollos de la muerte.
¿Quién será el que se viste entre las sombras
como si fuera un ermitaño en su covacha?
¿Quién puede hacer de su vida una tortura
escondiendo su cabeza en un agujero?
¿Quién puede hacer silencio ante lo injusto
y más tarde sonreírle al hechicero?,
él conjura las cimientes de lo indigno
y se pliega ante sí mismo como un cobarde
¿Quién puede cerrar los ojos ante lo infame?,
sabiendo que quien le paga al demonio un sueldo justo
tendrá para sí un servidor que incluso
se cobrará en la existencia aún lo probo.
Cerrar los ojos a lo inmoral y vejatorio
indica un juicio enfermo ante la vida
y sabiendo la inmundicia de la existencia
morirá según su mote y su valía.
CARLOS A. BADARACCO
27/8/11
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