sábado, 2 de julio de 2011

ROMANCE DE AMOR EN VIGO de CARLOS A. BADARACCO






Caminan de noche tarde
duendes de sendero breve,
caminan, caminan solos
y yo los estoy mirando

La noche clama suspiros
de mares de oleaje corto,
rompen las olas pequeñas
se rasgan tristes de pena

La luna llora en sus versos
tristezas de sol y vientos
llora la luna en la noche,
llora y sin un  reproche

La noche se va apagando,
se apaga la noche, noche
se apaga también mi alma,
se apaga deseando calma.

¡Ay que yo suspiro loco!
locura de amor y antojo,
duermo en la noche un poco
pensando en amores solo.

El día ya va llegando,
los duendes se van marchando
caminan lento el camino
se van hacia el mar en Vigo.

Ahora aparece el día
temprano de madrugada,
el sol ilumina el camino
y el viento sopla despacio.

Las luces por todos lados
se ven en la playa en Vigo,
las olas saltan ufanas
contentas en la mañana.

La playa O Vao espera
espera un amor prohibido,
la arena blanca se mueve
la espera se vuelve larga.

Allí en la arena  la  espero
la espero en la arena blanca,
la estoy aguardando lleno
de ardores de dulce ahínco.

Como un lobo estoy en celo,
en celo la estoy amando,
ahora en la arena blanca
estoy en pleno deseo.

Ya llega la mujer amada
viene con los pechos tensos,
fogosa como una loba
vehemente y apasionada.
Con todo mi amor a Lorca
y a España bendita y dulce,
“Romance de amor en Vigo”
cierra el telón censurado

03/06/09

No hay comentarios:

Publicar un comentario