Por las noches, con el cielo estrellado
busco recostarme sobre el herbazal
y allí esperarte y poder contemplar
la majestad del espacio infinito.
Quizás busque también tu ternura,
tus besos de miel y de amor fundidos,
como si el sol por la tarde
nos hubiese unido para siempre.
Pretendo a la vez tu abrazo
de deseo y esperanza,
tu calor ansío absorber con lujuria,
y entonces sí, que el cielo nos cubra
con su manto de astros luminosos
y proteja nuestra pasión irreverente,
franca, sutil, enardecida,
alianza de sano candor complaciente
fusionados los dos por el apetito voraz del deseo.
Y finalmente con la dulzura más delicada
unir nuestros labios inflamados
por un gemido etéreo,
recorrer tu cuerpo adormilado
con mis besos, suavemente,
acariciar tu rostro de seda, tenuemente
y ligarte para siempre a mi amor inmaculado
CARLOS A. BADARACCO (REGISTRADO)
3/05/09
Sutiles piceladas de amor
ResponderEliminarhermoso ....felicitaciones me encanta celebro la capacidad de poner en palabras los sentimientos mas profundos.no es mi caso pero me gusta leer poemas historias etc.
ResponderEliminar