Entre las sombras,
solo,
como un fugitivo más,
cercado por la ignorancia,
perdido,
estrechado en el tiempo,
consciente y sumido
en un tímido instante.
El tiempo,
la distancia,
dos espacios y una sombra,
la mía
la única,
solitaria y sombría,
sin un después,
sin mañana,
como acabado,
turbio,
ignorado,
incierto,
secreto ,
oculto,
como un adiós sin lamento,
sin suspiros ni tormentos,
así,
justamente así
me iré sin volver,
dejando la avaricia,
la envidia,
la pereza,
la pereza,
la lujuria,
la ira,
la egolatría
dejándolo todo,
todo, solo para vos.
CARLOS A. BADARACCO
5/5/11
¿Dejarás de pecar por amor?. ¡Cuidado! Hay amores que se nutren en pecado.
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